¿Alguna vez te has preguntado si las plantas pueden hablar? Durante siglos, asumimos que las plantas eran seres silenciosos, casi invisibles en su comunicación. Pero investigaciones recientes nos revelan que, aunque no puedan gritar o susurrar, las plantas producen sonidos, y esos sonidos podrían tener un papel clave en cómo interactúan con su entorno. Esto cambia completamente nuestra perspectiva: ¡las plantas no son tan silenciosas como pensábamos!
¿Qué sonidos producen las plantas?
Los sonidos que producen las plantas son ultrasónicos, es decir, se emiten en frecuencias demasiado altas para el oído humano, aproximadamente entre 20 y 100 kilohertzios. Gracias a grabadoras de ultra alta frecuencia, los científicos han logrado captar estos sonidos y descubrir patrones interesantes. En 2019, investigadores de la Universidad de Tel Aviv lograron grabar sonidos específicos en plantas de tomate y tabaco. Curiosamente, cada planta producía sonidos distintos según las circunstancias: una planta estresada, por ejemplo, emitía una “señal sonora” distinta a la de una planta sana.
Las grabaciones revelaron que las plantas emiten chasquidos secos, similares a los sonidos que hace el maíz al crecer, pero inaudibles para nosotros. Estos ruidos ocurren en momentos de estrés, como la falta de agua o cuando están lesionadas. Para los científicos, esta es una posible prueba de que las plantas intentan comunicar algo de lo que les ocurre, una especie de «grito» en su propio y sutil idioma.
La ciencia detrás de los sonidos
A lo largo de la historia, siempre hemos considerado que los animales son los únicos que necesitan y tienen formas de comunicación complejas. Pero hoy, sabemos que las plantas son organismos sociales que interactúan con otras plantas y con su entorno. Esto ha llevado a los científicos a replantearse las capacidades de comunicación vegetal.
La teoría de la emisión de sonidos en las plantas ha sido apoyada también por la bióloga Monica Gagliano, quien estudió la capacidad de las plantas para reaccionar a sonidos en su entorno. En sus experimentos, algunas plantas cambiaron la dirección de sus raíces en respuesta a vibraciones de agua subterránea, mostrando que escuchan o al menos reaccionan a sonidos sutiles. Con estos hallazgos, los investigadores creen que los sonidos que emiten las plantas pueden ser recibidos por otras plantas cercanas, como una advertencia o señal de auxilio.
Además, el descubrimiento de que estos sonidos se intensifican cuando la planta está bajo estrés (por ejemplo, en condiciones de sequía) sugiere que esta “comunicación” podría ser vital para la supervivencia. Quizás, al emitir sonidos cuando no encuentran agua, alertan a otras plantas para adaptarse o incluso regular su propio consumo de recursos. Aunque los estudios siguen en fase experimental, estos descubrimientos están transformando nuestra visión sobre la inteligencia y sociabilidad en las plantas.
¿Qué significa este descubrimiento?
Los científicos sospechan que esta forma de comunicación podría representar una forma de “inteligencia” en las plantas, lo cual contradice la visión tradicional de los seres vegetales como seres pasivos. Si bien aún no sabemos con certeza si estas señales pueden ser recibidas por otros organismos en el entorno, se plantea que otros animales, como insectos, podrían captar estos sonidos y reaccionar a ellos. Imagínate a una plaga de insectos acercándose a una planta que emite una señal de estrés: ¿podría este sonido actuar como una señal de advertencia para el insecto?
El descubrimiento de que las plantas emiten sonidos abre un abanico de posibilidades. ¿Será que las plantas también tienen sistemas de comunicación más complejos de lo que imaginamos? Los científicos esperan continuar estudiando los sonidos que producen en diferentes situaciones y ver si estos patrones pueden ayudar a entender cómo “comunican” su estado de salud o necesidades.
Plantas y humanos: ¿podremos escuchar estos sonidos algún día?
La idea de poder captar los sonidos de las plantas en tiempo real fascina a muchos científicos y fanáticos de la botánica. Algunos incluso sueñan con tecnologías que permitan traducir estas frecuencias ultrasónicas a sonidos audibles, como si nos conectáramos a una conversación secreta entre árboles y arbustos. ¿Te imaginas tener un “dispositivo traductor” que nos permita escuchar cómo hablan las plantas en su lenguaje ultrasónico?
La investigación de los sonidos de las plantas todavía es joven, pero con los avances en tecnología, es probable que en los próximos años descubramos aún más secretos sobre estos seres “silenciosos” que, en realidad, siempre han tenido su propio modo de expresión.
¿Es esto el inicio de una nueva era en la comunicación natural?
Así como aprendemos que los animales se comunican de maneras que antes ignorábamos, la idea de que las plantas también interactúan con su entorno nos conecta más profundamente con el mundo natural. Nos recuerda que la naturaleza tiene sus propios códigos y que a veces lo que parece inerte es, en realidad, un sistema complejo lleno de vida y conexiones. La próxima vez que pases junto a un jardín, quizás escuches, en el susurro del viento o en el crujir de las hojas, el eco de una conversación en la que las plantas llevan millones de años participando.
Descubrir que las plantas emiten sonidos podría abrir puertas a formas de cultivo más sostenibles, ¡e incluso a una relación más profunda con la naturaleza! Un mundo silencioso no es necesariamente uno carente de vida o de comunicación. Más bien, tal vez, simplemente necesitamos escuchar mejor.
